“«Amarás a tu prójimo como a ti mismo» dijo Jesús.
Contrariamente a todos los pesimistas y los misántropos que predican el odio de sí mismos, Jesús piensa que debemos amarnos. Sí, pero ¿cómo? O, más bien ¿Qué debemos amar en
nosotros?… Muchos seres humanos se aman muy poco debido a que no conocen la respuesta a esta pregunta. No saben que lo que deben amar en ellos, es el Principio divino que los habita.
nosotros?… Muchos seres humanos se aman muy poco debido a que no conocen la respuesta a esta pregunta. No saben que lo que deben amar en ellos, es el Principio divino que los habita.
Dios nos ha creado a su imagen, y esta imagen la manifestamos a través de nuestro espíritu, de nuestra alma, de nuestro intelecto, de nuestro corazón, y también de nuestro cuerpo
físico. Por lo tanto, amarse a sí mismo es también amar su cuerpo, pero no porque puede ser un instrumento de placer o de seducción. Debemos amar a nuestro cuerpo con pensamientos de gratitud hacia estos buenos sirvientes que son nuestros ojos, nuestras orejas, nuestra nariz, nuestra boca, nuestras manos, nuestros pies, así como el resto de los órganos que nos
permiten expresar la presencia de Dios en nosotros.”
físico. Por lo tanto, amarse a sí mismo es también amar su cuerpo, pero no porque puede ser un instrumento de placer o de seducción. Debemos amar a nuestro cuerpo con pensamientos de gratitud hacia estos buenos sirvientes que son nuestros ojos, nuestras orejas, nuestra nariz, nuestra boca, nuestras manos, nuestros pies, así como el resto de los órganos que nos
permiten expresar la presencia de Dios en nosotros.”
Omraam Mikhaël Aïvanhov
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